Bad Line, la evolución del antienganche

Todos sabemos que los anfibios y batracios son animales que ocupan un lugar en la cadena evolutiva de gran atractivo. Estos animales poseen características genéticas asombrosas que van desde la extraordinaria metamorfosis que sufren para convertirse en adultos hasta el curioso hermafroditismo de muchas de estas especies.
También sabemos que estos animales son una de las presas preferidas de cualquier pez carnicero de agua dulce. Y por ende, hay gran cantidad de señuelos que imitan ranas y sapos.

Ahora bien… ¿A donde quería llegar con esto de la “evolución” se preguntarán? Quiero demostrarles que los señuelos también evolucionan.

Hace algunos años empezaron a aparecer en el mercado algunos modelos de ranas y ratas anti-enganche, compuestas generalmente por un cuerpo de goma hueco y más o menos blando, que generalmente reviste a un anzuelo doble.  El anzuelo entonces permanece escondido hasta que algún pez ataca al señuelo. El hecho de que el anzuelo permanezca escondido dota al señuelo de libertad para moverse sobre o entre la vegetación sin que el anzuelo se enganche en la misma.

La gran problemática que presentaban estos señuelos, al menos con nuestra especie más popular, la Tararira, era la dificultad para clavar al pez cuando éste ataca el señuelo. Dificultad que en mi opinión nace en la diferente plasticidad que el conjunto tuviese. Al elegir, uno trataba de encontrar el material más blando posible para que al ser mordido ceda rápidamente y el anzuelo se libere y se clave con mas facilidad en la boca del pez. Pero esos materiales, demasiado blandos son en general los mismos que se rompen con más facilidad ante los afilados dientes de nuestras Tarariras.

Si analizamos un poco nos daremos cuenta de que estos señuelos nacen originalmente en Japón y ganan mercado rápidamente en Europa y Estados Unidos, países todos, donde se los utiliza con gran éxito para la pesca del Bass. El problema es que las Tarariras que nosotros pescamos, difieren mucho del Bass en cuanto a la fortaleza de su dentadura y la dureza de sus mandíbulas. Allí entonces tenemos la razón por la cual señuelos presentan serios problemas de efectividad, ya que además de resultar difícil clavar las piezas, por la dureza de sus fauces, lo señuelos quedaban seriamente dañados por los afilados dientes de las Tarariras. Evidentemente estos señuelos no fueron pensados para nuestras especies.

Pues bien. La evolución nos ha solucionado o al menos minimizado muchísimo el problema. Recientemente han hecho su aparición en el mercado una nueva línea de este tipo de señuelos: la marca Bad Line, que incluye ranas, sapos, ratas y señuelos blandos en general, basados en aquellas ranas anti-enganche originales, pero adaptados a las características de los peces que habitan el cono sur.
Esta nueva linea de productos soluciona con la incorporación de un nuevo material el problema que antes mencionamos. Y no es casualidad, estos productos de origen brasilero, están pensados y diseñados para pescar justamente las malabaricus que habitan en el sur de Brasil.

La linea incluye 5 modelos diferentes. Todos ellos en colores básicos, pero sumamente efectivos, cada uno de ellos ajustado con anzuelos dobles y lastre interno diferencial que optimizan su natación de cada modelo particular.
El acabado final de los señuelos no es todo lo minucioso y refinado que uno está acostumbrado en otros productos, pero esta falencia se ve compensada con la altísima efectividad que tienen.
Esto demuestra que no necesariamente un señuelo tiene que ser atractivo a los ojos del pescador para ser efectivo con los peces.

El material que conforma el cuerpo del señuelo tiene una dureza mínima, y colapsa inmediatamente ante una mordida, dejando al desnudo los anzuelos dobles que muestran diversos ángulos, según el caso y facilitan aun más la clavada.

El material ademas de ser sumamente blando es altamente resistente a pinchazos y rayaduras, con lo cual resultan casi inmunes aún después de haber pescado muchísimas piezas. Como pueden ver en las fotos, en algunos casos se deforman completamente de tan blandas, esa cualidad es la que las hace super efectivas.
En cualquiera de los modelos la diferencia con lo que conocíamos es abismal, evolución pura.

Si tenías problemas para clavar con las ranas anti-enganche, Bad Line es la solución.

Podés encontrar información mas específica de cada modelo en el sitio web de Bad Line.
Para conseguirlas en Argentina, click aquí.

Texto: Diego Aprigliano / Fotos: Diego Aprigliano – Jorge Sánchez – G. I. Spajic